Redes Sociales: ¿En qué consiste una buena estrategia?
En la actualidad se considera una grave omisión que una empresa no tenga presencia en las redes sociales.
Peor aún sería que participara en redes sociales sin tener una estrategia.
A continuación señalaremos los elementos esenciales para lograr un Social Media Plan efectivo.
En la actualidad sería casi un suicidio que una empresa no tenga presencia en redes sociales y otro mayor encargar su gestión a inexpertos.
Las redes sociales representan el primer contacto con los clientes y una herramienta esencial en la elaboración de una estrategia de marketing de contenidos.
La persona encargada, el community manager, debe estar preparado para posicionar la marca y defender su prestigio.
El community manager debe tener amplio conocimiento de analítica web, curación de todo tipo de contenido y gestión de reputación de la marca.
La importancia de las redes sociales
Para entender la importancia de las redes sociales, debemos irnos hacia el campo de las ciencias sociales.
En el libro, “La guía del Community Manager. Estrategia, táctica y herramientas”, de Juan Carlos Mejía Llano, podemos encontrar una definición precisa.
“Una red social es un grupo de personas o entidades conectadas entre sí por algún tipo de relación o interés común”.
Un poco de historia
El término red social fue acuñado por los antropólogos británicos Alfred Radcliffe-Brown y John Barnes.
Las redes sociales están basadas en la teoría de los seis grados de separación propuesta en 1930 por el escritor húngaro Frigyes Karinthy en su cuento “Chains”.
Esta sostiene que “todos los habitantes del mundo están conectados entre ellos con un máximo de seis personas como intermediarios en la cadena.
“Esto hace que el número de personas conocidas en la cadena crezca exponencialmente a medida que el número de conexiones aumenta.
“Permitiendo que sólo se necesite un número pequeño de conexiones para formar una red que conecte una persona a cualquier otra del mundo”, según Mejía Llano.
Permiten conocer al cliente
Es por eso que las redes sociales significan tanto para las empresas, ya que representan oportunidades para la creación de comunidades con nuestro público objetivo.
Esto, a su vez, abre un canal de comunicación que permite ampliar el conocimiento sobre los clientes, como conocer los sentimientos y las necesidades de clientes actuales y potenciales.
Además, las redes permiten abrir los canales emocionales por lo que es fácil llegarle a su corazón y a su vez lograr algo muy preciado, obtener su fidelidad y cercanía con los clientes.
Hay más beneficios que se obtienen con una buena estrategia de redes sociales, como la gestión de la reputación empresarial, la difusión de información importante de forma inmediata, el seguimiento cercano de la competencia y, el más importante, aumentar el volumen de ventas y mejoras en el servicio al cliente.
Arma tu propia estrategia de redes sociales
En el éxito de una empresa en las redes sociales no interviene el azar, es la consecuencia de un gran trabajo de planeación estratégica y de establecer de forma ordenada las acciones que se realizarán.
En el libro “Estrategia y táctica empresarial en redes sociales”, de Juan Merodio, se establecen algunos puntos fundamentales que se deben de contemplar para logran lo que él llama un “Social Media Plan efectivo”.
Para comenzar, hay que plantear un objetivo y para lograrlo se puede comenzar con una pregunta muy sencilla: ¿Por qué queremos que nuestra empresa esté en las redes sociales?
“Realmente si hemos decidido aprovechar el potencial de las distintas redes en beneficio de nuestra empresa, debemos tener claro por qué queremos hacerlo.
Primeros pasos
“Para ello, el primer paso es definir unos micro objetivos que nos ayuden a saber por qué vamos a estar en las redes”, menciona Merodio, uno de los principales expertos de marketing digital, management y transformación digital de España, Latinoamérica y Canadá.
Merodio explica que los primeros objetivos no se deben enfocar en la venta, sino en la generación de una comunidad crítica de usuarios en torno a la marca para que se le dé, poco a poco, un valor aplicable al giro del negocio.
El experto ejemplifica de una forma muy clara esa idea de alcanzar pequeños objetivos como mejorar la imagen de la marca.
“Imaginemos que tu empresa lleva un tiempo operando, pero la marca no es del todo conocida. Entonces, puedes aprovechar las redes sociales como canal de difusión de tu marca para generar branding”.
Cuidar la reputación online
Otra objetivo que Merodio recomienda es abrir el canal de comunicación para preguntarle a los usuarios de redes una opinión sobre los productos o servicios.
Un segundo paso es realizar un análisis de la presencia actual de la empresa en los medios digitales, para saber de dónde se parte y hacía donde se va.
Es importante vigilar estas tres líneas: nivel de presencia, posibles problemas de reputación online y comentarios negativos que afectan a la marca.
En este punto también se recomienda vigilar el estado de la competencia y de los influencers que dominan nuestro sector, ya que puede ser útil para atraer a sus seguidores a la marca que pueden ser parte de nuestro público objetivo.
Para tener una buena estrategia es importante monitorear la reputación online de la empresa, ya que el 78% de los usuarios hacen caso de las recomendaciones que otros usuarios escriben en Internet.
Para esta tarea se necesita inversión económica, ya que las mejores herramientas para realizarla tienen costo.
Es muy importante para la estrategia, pensar muy bien en el perfil de la persona que se encargará de gestionar las publicaciones y la reputación de la marca por medio de respuestas a los seguidores.
“Básicamente tienes tres opciones: contratar a un community manager internamente, repartir el trabajo entre distintas personas de la empresa o contratar a una agencia especializada”, señala Merodio.
El experto recomienda la primera opción y hace énfasis en verificar que la persona cuente con la preparación para realizar esas tareas.
Elegir las redes adecuadas
Ya para afinar los detalles, se debe de elegir con cuidado la red social en la que vamos a enfocar nuestros esfuerzos.
Las principales son Facebook, Twitter, Instagram, YouTube y Linkedln, pero se puede prescindir de alguna, la meta es aumentar el número de seguidores significativamente.
También hay redes sociales especializadas en algunas temáticas y si existe alguna que hable de los productos o servicios de la marca, es recomendable entrar y manejar un perfil.
Ahora, si se opta por llevar más de una red social, cada una debe de tener estrategias de marketing y publicación diferentes, por lo que se debe pensar muy bien qué objetivo se persigue en cada una.
Alistar las herramientas
Finalmente para establecer una estrategia exitosa se deben considerar dos aristas importantes: la herramienta para realizar publicaciones y la herramienta para medir los resultados.
En el primer caso, hay varias herramientas en el mercado para programar las publicaciones, editarlas, gestionarlas y darles seguimiento.
También se debe contemplar la inversión de anuncios en cada red social para dar un impulso al contenido de calidad.
En cuanto a la parte de la medición, es esencial definir las key performance indicator (KPI), es decir los indicadores de desempeño.
“Es imprescindible medir si todo el trabajo ofrece algún tipo de beneficio al negocio y se está logrando los objetivos marcados”, dice Merodio.
Con todos estos elementos podemos comenzar el camino hacia un Social Media Plan efectivo.
Debemos ser flexibles con nuestra estrategia social, ya que las redes sociales están vivas y cambiando constantemente, algo a lo que debemos aprender a adaptarnos.