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Diferencias entre el outsourcing legal y el ilegal en México

Diferencias entre el outsourcing legal y el ilegal en México

El outsourcing legal o subcontratación es una práctica comercial-laboral que consiste en contratar a un tercero, fuera de la empresa, para que realice servicios y genere bienes que la empresa contratante no realizaba internamente.

El outsourcing de personal es una práctica que suelen realizar las empresas como medida de reducción de costes.
Puede intervenir en una amplia gama de trabajos, que van desde la atención al cliente hasta la fabricación y el back office.

El servicio de outsourcing se estableció en 1989 como estrategia empresarial hasta convertirse en una parte integral de la economía en la década de 1990.

En muchos países incluyendo México, esta práctica genera controversia.

Ha sido señalada como un método para evadir impuestos y responsabilidades sociales con la base laboral.

En México, se permite subcontratar servicios especializados, siempre y cuando no sean la actividad preponderante de la empresa cliente.

Las agencias subcontratadas podrán participar en el reclutamiento, selección y capacitación de empleados, pero sin ser considerados patrones.

La empresa subcontratada tendrá que estar registrada ante la Secretaría del Trabajo y Previsión Social.

Sus partidarios argumentan que genera incentivos para que la iniciativa privada (aunque también la emplean entes públicos) asignen recursos donde resulten más efectivos.

La actual Administración Pública Federal creó un grupo interdisciplinario integrado por el Servicio de Administración Tributaria (SAT), IMSS, la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) y Procuraduría Fiscal de la Federación.

El objetivo consiste en erradicar las prácticas que no se ajusten a lo establecido por la Ley Federal del Trabajo en su artículo 15-a.

Las autoridades hacendarias estiman que un total de 6 mil empresas de subcontratación emplean esquemas considerados abusivos y el monto de la defraudación fiscal alcanza 21 mil millones de pesos anuales.

El universo de la también llamada terciarización de servicios abarca aproximadamente 5 millones de mexicanos.

¿Cómo reconocer el outsourcing legal?

En el outsourcing legal, al trabajador se le entrega un recibo de nómina sellado por el SAT, que incluye el monto de su sueldo, retenciones impositivas y prestaciones legales.

El empleado está dado de alta ante el IMSS e Infonavit con su sueldo real.

El trabajador no está contratado bajo otros esquemas tales como honorarios o derechos de autor.

En su acta constitutiva, el proveedor estipula ante el SAT su actividad como subcontratador de personal y emite una factura deducible a la empresa contratante donde detalla este servicio con su respectivo desglose de impuestos.

¿Cómo reconocer el outsourcing ilegal?

En su facturación aparecen otros servicios distintos al outsourcing.

Comúnmente dejan de pagar las cuotas del IMSS o Infonavit o evitan reportar el sueldo real con el objetivo de reducir los impuestos de nómina, ISR.

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